Fotografía Erótica y Erotismo

Es la fotografía erótica y el erotismo el tema de nuestro artículo, pero esto no es algo moderno o nuevo, desde hace un tiempo que nos acompaña en la existencia del hombre, hacía los primeros humanos que durante su evolución, comenzaron a desarrollar zonas sexuales más suaves, atractivas y prominentes adaptadas para la vista y el placer, después de eso por el uso mas consciente de lo que era erótico y placentero, en la misma línea, por el manejo mas estricto de lo prohibido.

El desarrollo en la Historia

Como una contraparte, el uno del otro desde los tiempos de los Griegos y Eros (dios del placer), y después el arte qué adoptando a la mujer como medio de expresión, así como las formas de plasmarlo, como en el caso de las “Venus”, en específico, “La Olympia – 1863” y “La Maja desnuda – 1795”; las cuales pueden considerarse las primeras imágenes que representan con total intención el uso, no solo de la desnudes si no del erotismo, de la exhibición, de lo prohibido y del placer llevado de la mano del sentido de la vista, ciertamente, herramienta que será para Obscuro Placer, la base y lienzo tras el cual plasmaremos nuestro arte y estilo fotográfico.

Lo trágico

Lamentablemente lo erótico, no siempre ha sido bien aceptado y por lo tanto, a cruzado por etapas de censura y prohibiciones impuestas por la llegada del catolicismo quien en primer lugar, ha reducido el falo a algo aberrante, además lo a limitado únicamente a la función de reproducción, mientras así, exige que el cuerpo de la mujer sea cubierto y sobre todo, deberá ocultar en todo lo posible su sexualidad con sus ropas.

Es importante comenzar aclarando que para nosotros “Obscuro Placer”, el erotismo es algo sumamente normal, no contiene ningún contexto pecaminoso, inmoral o maligno, si no todo lo contrario, consideramos que es sin duda alguna la cúspide de la sexualidad, el placer y el deseo, aun más importante, lo consideramos un pilar extremadamente importante de nuestra sociedad y de las relaciones personales, en otras palabras, que debería de ser cuidado, protegido y fomentado; dicho esto explicaremos un poco cómo es que lo vemos y lo sentimos.

El concepto

Hacer público lo que todo mundo sabe, pero nadie habla por qué es indecoroso pero que expone un secreto a voces: el deseo y el placer, lo que resulta importante aquí es transformar en observador de la intimidad al espectador, en la mirada atrevida que observa lo prohibido, lo oculto y a partir de esto crear un medio de excitación y la fusión del arte en ello.

De forma indirecta, la misma ropa juega a favor y provee un sentimiento fundamental que es el deseo de ver, del mismo modo es el desnudar, parte del mismo fin que es el placer, por que el deseo exige ver, esto lleva a pensar en la exhibición al mismo tiempo que el espectador se trasforma en “voyeur”; el grado de excitación será directamente proporcional a la intimidad de las imágenes que se hayan observado.

Hablamos del desnudo y del erotismo desde la dimensión de lo bello, desde el punto de vista romántico del erotismo.

La desnudes puede ser arte siempre y cuando el objetivo (el cuerpo), sea tratado como algo uniforme, de modo que los atributos sexuales no cobren la única importancia, sí no que todo funcione desvinculado de este aspecto “Freud – 1905”.

Sigmun Freud acento algunos de los conceptos claros que separan el arte de la pornografía, de manera similar, nosotros concordamos en muy buena parte con ese concepto pero, por otro lado damos nuestra propia versión de la interpretación sobre la que construiremos nuestro propio arte.

Creemos en un todo, donde el cuerpo y los atributos sexuales son los personajes principales, pero a su vez son parte y van envueltos en un conjunto de situaciones, como la iluminación, los elementos, momentos y situaciones, que terminan de aderezar y complementar el arte y la intención.

Nuestro sello erótico

Cómo en todos nuestros estilos, nos damos libertad de ser creativos así como curiosos, pero en particular, es este estilo donde nos permitimos un grado de agresividad y una vía de comunicación directa y clara, en algunas ocasiones sin rodeos; en contra parte con otras ocasiones donde todo queda cobijado en el manto de la inocencia falsa y las pequeñas sutilezas, apenas visibles que hacen creer al observador en una idea inocente y pícara de lo que esta sucediendo de fondo.

Somos amantes de agregar a la mezcla no solo los atributos sexuales si no la exquisita gama de expresiones faciales y mensajes visuales que cada gesto nos brinda, mientras nos hablan claramente de lo que se vive en ese momento, pero por otro lado, también trabajamos sobre un aspecto de anonimato.

El uso de fotos anónimas, más que desvirtuar al ser en cada foto y priorizar solo en lo prohibido y lo oculto; en Obscuro Placer lo usaremos como un medio o herramienta con la que buscaremos, tanto crear un espacio seguro para nuestros clientes, así como volvernos cómplices y crear una pequeña grieta en el sistema logrando un equilibrio pícaro entre la obligación de la sociedad por ocultar lo prohibido, y la rebeldía de mostrar y desobedecer, encontrando así, irónicamente erotismo y placer en estos desnudos cobijados y avivados por el mismo anonimato que busca mitigarlo y limitarlo.